El patio del
colegio, es un mundo apasionante. Quién no recuerda, para bien ó para mal, el
patio de su colegio. El recreo puede unir a amigos hasta el infinito y,
también, sacar lo peor de cada uno. En el colegio de mis hijos, un grupo de
padres generosos, han pintado en el suelo juegos tradicionales, rayuelas,
circuitos…y en educación física se salta a la comba. El patio vuelve a ser cómo
cuando los cuarentones éramos pequeños. Se juega a la goma, suenan canciones
para saltar la cuerda, los que corren es por el balón prisionero, ruedan
peonzas de todos los colores y tamaños y se ganan y pierden canicas, sí canicas.
Un mundo apasionante.
Canicas,
boliches, bochas, chivas, maras, cachinas, cayucos, balas, mables…miles de
nombres tienen según el país donde se juegue.
Y es que su
origen, aunque nos parezca increíble, se remonta al Antiguo Egipto. Se han
encontrado canicas presentes en la tumba de un niño egipcio de alrededor del
año 3000 a.C. En la Antigua Roma era un juego muy popular.
Y en el
siglo XXI, siguen rodando por los patios, y por debajo del sofá de mi casa.
No sé como
surgiría en el colegio de mis hijos, quién fue el primero que llevó canicas,
pero un día, mi hijo pequeño me dijo:”yo
quiero tener canicas”. Casualmente, tengo un jarrón con piedras de colores
y canicas (que para adornar también se han utilizado mucho) y del jarrón, como
por arte de magia, salieron canicas multicolor para estupefacción del benjamín.
Su cara, en ese momento, puede ser reflejo fiel, de “flipo con mi madre” o “es
el mejor día de mi vida”.
Canicas de
colores que tienen diferentes nombres. Petrolera
si es de colores opacos, Ojos de gato, con un diseño amarillo en el centro, como un
ojo, Martas, blancas con colores
matizados, Trébol, transparente con
tres pinceladas en su interior, Agüita,
de vidrio, sin adornos .
Y se puede
jugar de muchas maneras, según el país donde estemos. Lo que hay es que dejar
las normas claras en un principio. La habilidad y la puntería son fundamentales.
Aquí podéis
ver ejemplos de cómo se juega, por si nunca jugaste, se te olvidó o quieres
enseñarle a algún niño. "como jugar"
Mucha
precaución con los más pequeños. Siempre vigilantes, adultos responsables.
Y se ganan y pierden canicas, perdidas porque un contrincante te
ha superado, porque te las has apostado o porque, le diste fuerte y nunca más
se supo de ella. Igual crean algún conflicto, pero nada que no pueda haber
pasado desde años inmemoriales.
Los niños deben aprender a solucionar esas
cosas, deben responsabilizarse de “sus canicas”. Yo, mi norma básica exigida es
que nunca tenga que llamarles la atención un profesor, en clase, por las
canicas.
Si uno de
mis hijos le quita una canica al otro, el lío está asegurado. Pero si le gana
una canica…son las reglas del juego. Eso es lo que deben aprender a gestionar.
Son juegos
de niños, de niños de toda la vida, de antes, de ahora, de los del Antiguo
Egipto y de los españoles de menos de doce años, en 2019.
Ahora
vuelven a traer los pantalones sucios de jugar en el suelo, les ilusiona un
juego que también ilusionó a sus padres y los abuelos les cuentan sus historias
con canicas mientras los niños alucinan de que existieran canicas hace tanto
(bendita inocencia)
Voy a
regalar canicas, tirarme al suelo a ganar ó perder alguna para volver a llenar
el jarrón.
Nada es tan
nuevo como parece, y mucho menos LAS CANICAS
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